La Agenda 2030 de desarrollo sostenible es una hoja de ruta mundial para transformar nuestro mundo para mayor prosperidad, paz y bienestar. Está compuesta por 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que contienen 169 metas globales, y son promovidos activamente por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Los ODS abarcan numerosas áreas críticas que requieren atención urgente. Estas incluyen erradicar la pobreza extrema, garantizar la energía segura y asequible y mejorar la educación. También incluye la lucha contra el cambio climático, el uso responsable de los recursos naturales, reduciendo la iniquidad entre los géneros, reduciendo las desigualdades entre las naciones, mejorando la salud respiratoria y mucho más.
Aunque hay un gran apoyo global a los ODS, todavía hay una falta de interés general en llevarlos a cabo efectivamente. La causa principal de esto es el hecho de que no hay suficiente interés tanto público como privado. Aunque hay varias iniciativas gubernamentales y empresariales para promover y lograr estos objetivos, todavía no se están realizando con la misma urgencia o escala como se requiere.
Para aumentar el compromiso público y privado con los ODS, existen varias estrategias que podrían ayudarnos a alcanzarlos. Una estrategia clave sería fortalecer la información disponible sobre los ODS para que aquellos involucrados en el proceso decisorio tenga acceso a él. Esto incluye material educativo adecuado para los gobiernos, líderes empresariales y organizaciones sin fines de lucro para que sean conscientes del impacto que sus decisiones tendrán sobre estos objetivos mundiales.
Además, fortalecer los vínculos entre organismos gubernamentales e industria privadas es otro aspecto fundamental. Los gobiernos necesitan trabajar en conjunto con las empresas para lograr los objetivos planteados en la Agenda 2030. Esta colaboración también necesita ser motivada a través de incentivos financieros y políticos tales como mejoras en el marco regulatorio para el financiamiento de proyectos relacionados con ODS. El Gobierno debería asignar fondos específicos para promover iniciativas de este tipo; por ejemplo mediante subvenciones, préstamos baratos y otros programas similares.
Otra forma importante en la que se puede aumentar el interés público y privado hacia los ODS es a través del uso de herramientas tecnológicas innovadoras. La tecnología moderna nos brinda tremendas oportunidades para monitorear el progreso hacia cada meta específica de ODS; entender mejor dónde debemos enfocar nuestras inversiones; compartir idea; definir objetivos universales; vincular sectores; mejorar la transparencia e información del sector privado; bajar costes; impulsar la productividad; mejorar el acceso a datos e información críticas.
Finalmente, debemos recordar continuamente la importancia de lograr la Agenda 2030. A nivel mundial, podemos motivarnos mutuamente para alcanzar los ODS a través del compromiso colectivo y apoyarnos mutuamente durante el camino hacia su cumplimiento. Esto se logrará informando a los ciudadanos sobre el progreso alcanzado hasta ahora; con un mayor compromiso público y privado para escucharlas demandas; promoviendo campañas globalmente, incluidas campañas mediáticas/publicitarias que tengan como objetivo ampliar el conocimiento sobre este tema, así como inculcar un fuerte sentido de responsabilidad ciudadana dentro del contextoflos ODS.
En resumen, para lograr los ODS contenidos en la Agenda 2030 es esencial un mayor interés público y privado. Esto es parte clave del trabajo que todos debemos hacer colectivamente para construir un mejor futuro para nosotros y para las generaciones venideras. La consciencia social general es crucial para lograr este objetivo mundial, y con compromiso colectivo global podemos aspirar a un futuro más equitativo e inclusivo para toda la humanidad.
